Estabas feliz de andar de paseo y con ganas de explorar, le
pediste a tu madre que te llevara a caminar mientras yo hacía el desayuno. Regresaste
emocionada a contarme lo que habías visto y a decirme hasta donde habían
caminado. Sin duda eres toda una exploradora. Y pensar que aún faltaba lo
mejor! Te habíamos prometido llevarte a un lago así que nos fuimos los tres a
seguir explorando y cuando llegamos lo que más querías era salir corriendo y jugar
al escondite en aquellos campos inmensos. Por un ratito jugamos contigo, pero
darte rienda suelta en un lugar así implicaría que todavía hoy estaríamos buscándote
entre los árboles y tu corriendo como loca riéndote a carcajadas.
Como aún no me siento bien hoy, y ya que no fuiste a la
escuela tampoco, te quedaste todo el día en casa conmigo. Cuidándome, te
pegabas a mí mientras estaba acostado en la cama y me decías que te ibas a
acurrucar conmigo todo el día para que me sintiera mejor. Exactamente eso
hiciste hoy y te agradezco mi amor por tu compañía. Te amo hija. Gracias por
hoy.
No comments:
Post a Comment