Hacía ya demasiado tiempo
que tenía pendiente el terminar de enseñarte cómo montar bien una bicicleta.
Desde el día en que le quité las rueditas de práctica a la bici y te frustraste
por no saber qué hacer, no volviste a tocarla. Con el pasar del tiempo tu
frustración se transformó en un pánico que salía a relucir cada vez que nos
veías a mamá y a mí, la intención de llevarte afuera a practicar. De hecho,
aunque mataras porque te lleváramos al parque, solo mencionábamos La bicicleta
y ya se te quitaban las ganas de ir. Pero esta vez decidí que ya había
postergado esto demasiado y así, entre llantos, quejidos y objeciones, fuimos a
intentar ganarle a tu miedo finalmente. "Tengo miedo! No puedo," me
decías con una convicción resoluta, enjugando lágrimas que al mismo tiempo me
hacían dudar de si debía o no obligarte a tratar de hacer esto. Pero sentí que
la lección de aprender a sobreponerte a tus inseguridades era más importante.
"No puedo, me voy a caer," insistías hasta que de un momento a otro,
luego de varios intentos, solté la bicicleta y aún diciéndome que no podías,
pedaleabas sola sin mi ayuda y sin darte cuenta. Solo tomó un par de exitosas
pedaleadas y ya no había nadie que te bajara de la bicicleta.
El fin de semana fue la
boda de una de tus teachers de pre-escolar y fuiste con mamá a la ceremonia de
la iglesia con otros alumnos para darle una sorpresa. Estabas preciosa con un
vestido y zapatos blancos y, al terminar la misa, fui yo quien te pasó a
recoger para llevarte a casa. Por supuesto que te quejaste conmigo de que
aunque estabas invitada a la boda, no te estábamos llevando a la fiesta con
nosotros. "No te preocupes papá, mientras ustedes hacen fiesta, yo juego
solita, pero llévenme con ustedes." Al llegar a casa y bajarnos del carro,
empezaste a colocar en el piso, en dirección a la puerta de entrada, un camino
con pétalos de rosa que habías traído de la iglesia. Al preguntarte qué hacías,
me dijiste: "estoy haciéndote un caminito para que cuando regreses de la
fiesta, no te pierdas y encuentres el camino hacia mi." Te amo hija.
Gracias por hoy.