Tuve el mejor día de San
Valentín! Cuando llegué a casa me estabas esperando para darme una tarjeta que
tú misma escogiste y me escribiste un mensaje deseándome un feliz dÍa. Yo te
traje una rosa roja y fuiste corriendo donde mamá a contarle que te había dado
una flor como las que le había dado a ella. Como no has estado bien de estómago
últimamente el doctor te recomendó dejar los lácteos por un tiempo, y como sé
que te han hecho falta las galletas y el Yogurt (que amas sobre todas las
cosas), quería hacerte un postre delicioso que pudieras comer. Así que me
ayudaste tú misma a hacer un dulce de chocolate sin nada de leche para comer
después de la cena de Tacos al Pastor, los favoritos de mamá. Tu misión era
romper las barras de chocolate oscuro y mezclarlas con margarina para
derretirlas en un tazón. Lo más difícil para ti fue no comerte los pedazos de
chocolate, ya que te había dicho que no podías hacerlo porque estaban
justamente contados para la receta.
Ahora son las 10 de la
noche y acabamos de llegar a casa porque fuimos a ver el Mago de Oz al parque
con Mamá, Marifer y Tia Maité. Te encanta quedarte despierta hasta tarde,
supongo que te comprendo ya que yo siempre fui así. Cuando niño, hacía hasta el
último esfuerzo para quedarme despierto en las noches y tú eres igual. El saber
que estás tan cerca de la media noche te hace muy feliz, pero la pelea viene cuando
te mandamos a acostarte, aunque sabemos que apenas toque la almohada tu cabeza,
quedaras rendida...como acaba de pasar en este instante. Te amo hija. Gracias
por hoy.
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