Tu mamá se fue de viaje esta semana así que nos quedamos
solitos los dos. Por supuesto aprovechamos para hacer muchas cosas juntos
(mitad para que no te diera chance de estar triste sin mamá y mitad porque a mí
me encanta a veces tenerte toda para mi). Entre el fútbol, ir al zoológico, el
parque hacer tareas y jugar en casa, te mantuviste muy entretenida para no
darte oportunidad de estar triste con la falta de mamá.
El día que llegaba mamá de viaje me rogaste que te llevara a
buscarla al aeropuerto. Tenía mis dudas porque ya era pasada tu hora de dormir,
pero estabas tan ansiosa y feliz de que llegaba que al fin no pude decirte que
no. Me dijiste que querías darle una sorpresa a mamá, así que decidimos que te
ibas a esconder detrás del asiento para que ella no te viera antes de montarte
en el carro. Usualmente eres pésima para dar sorpresas porque no te contienes
(no te paras de reír) pero en esta ocasión, logramos sorprender a mamá
completamente. Ella estaba un poco triste porque no habías ido al aeropuerto y
tenía muchas ganas de verte, cuando de pronto saltaste del asiento de atrás gritando
“sorpresa.” Todavía ni ella ni yo sabemos cómo hiciste para contener tu risa y
hablar antes de tiempo, pero lo hiciste, e hiciste a tu madre muy feliz. Te amo
hija. Gracias por hoy.
No comments:
Post a Comment