Thursday, March 30, 2017

Nov. 2, 2016

Este fin de semana fuimos a quedarnos en un hotel que queda muy cerca de la selva y en donde tienen un orquidiario, un criadero de mariposas y uno de ranas que fuimos a visitar. Sorprendentemente estabas muy atenta a todo lo que la guía decía de las orquídeas, mientras yo me perdía la mitad de la charla por estar correteando a Lorenzo quien sólo quería salir corriendo sobre las piedras y el lodo. Comprobé nuevamente tu habilidad de hacer amigos cuando al regresar del tour te le acercaste a una niña cerca de la piscina y simplemente te le presentaste: "hola, soy Valentina, quieres jugar conmigo?" Y así de fácil adquiriste una compañera de juegos para que fin de semana. Me encanta que tengas la seguridad suficiente para atreverte; siempre que vamos a algún sitio terminas rodeada de nuevos amigos.
Mientras estábamos en la mesa cenando tratabas de leer las palabras en mi camiseta con cierta dificultad. Las letras leían "Purdue University" y Me preguntaste por su significado. Te conté que esa era la universidad en donde había estudiado y donde mamá y yo nos habíamos conocido. Eso llamó tu atención y dió inicio a una serie interminable de preguntas como: "estaban juntos en el salón?" "Y entonces cómo se conocieron?" "Jugaban juntos en el recreo?" "Y a qué jugaban?" Tu madre y yo ambos nos miramos sin saber qué responder.

Mientras escribo estas líneas te veo dormir en tu cama. Mamá te prometió (en nombre mío) que yo iría a dormir a tu cuarto esta noche para acompañarte (aun no tengo claro por qué razón). Después de un día muy activo en donde jugaste todo el día con Marifer y luego fuimos al cine con ella y tu amiga, la otra Valentina, quedaste rendida e inmóvil regalándome solo una minúscula esquina de tu cama en donde acostarme. Te confieso que no llegué a terminar de contarte todo esto en el "miércoles" ya que me quedé dormido a tu lado observándote. Te amo hija. Gracias por hoy.




No comments:

Post a Comment